10 de marzo

Creo que estos no son mis mejores días. Los indicadores de biorritmo de las aplicaciones del celular de Mariana dicen que mi inteligencia anda en –90 mi nivel emocional en –100 y mi nivel físico en –95. No se en que se basa el estúpido celular para decir esas cosas, debe ser un rollo sin ninguna fundamentaciòn científica, los datos te los da comparando tu fecha de nacimiento con la fecha actual, un rollo muy pseudoscience, con graficas y toda la onda.

Pero la verdad es que quiero escribir desde hace rato y simplemente no puedo. La conexión que establece mi sensibilidad con mi vida cotidiana esta rota de algún modo. Si no puedo renovar el lenguaje o crear una prosa impecable me gustaría cuando menos ser sincero o asertivo, o notar cosas que están ahí, en algún lado, pero tampoco las puedo ver.

Se que dentro de mi hay una debacle emocional que no he querido confrontar, pero cuando lo he deseado tampoco he podido expresarla. No puedo esperar hasta junio, cuando según el celular, mis niveles son óptimos casi todos los días. Tampoco he podido leer mucho, abandono los libros a la mitad. El Nuevo Testamento me tiene absorbido en estos días, son cosas que todo hombre debe de leer. Llevo los evangelios, los hechos y la epístola a los romanos, pero en realidad no he podido generar ninguna opinión importante al respecto. Leí los Hechos en un día, como si fuera una historieta, y lo disfruté como si fuera una historieta. Lo único que puedo decir al respecto es que si bien me encanta la versión de Reina y Valera extraño las notas al pie de pagina de las ediciones católicas, llenas de referencias a San Eusebio y San Agustín y todos esos doctos padres de la iglesia. De algún modo la hipertextualidad le agrega sabor a la lectura, esa ansia de conocimiento despertada, la capacidad de atar cabos, la emoción de dar en el clavo, eso es vida muchachos. Eso es gozo en toda la acepción.

Últimamente hablo con personas a las que no les digo nada interesante, pero creo que me tienen deferencia porque se sienten culpables. Me siento muy amargado de pronto, estoy amargadisisimo. Siento a veces la bilis en la boca, se me tuerce el gesto sin que yo quiera, me aparto, me pongo las manos en la frente. Necesito aire. Los mando al diablo y luego yo me siento mal por eso.

No me gusta vivir aquí.

Y es que hablar de mi me pone mal, y pone mal a los que están a mi alrededor. Y eso no me gusta. A veces me deprimo y no tengo un porqué, si la fluctuación de estrógenos que si el mal clima. Y el mundo es horroroso. Pero generalmente no supedito mis razonamientos a mis estados emocionales, y no busco que uno justifique otro, y tampoco viven en una batalla entre ellos. Creo que la gente en realidad somos idiotas. Creo que a veces nos gusta estar mal y sentirnos jodidos y en lugar de tener una razón buscamos razones al respecto. Somos estupidos y eso está mal. Yo ya quiero estar bien. De hecho, creo que en este momento me siento MUY bien, a ver cuanto dura.

Comentarios

Indio Cacama dijo…
Según otra pseudociencia estás en un período masoquista.

no he podido generar ninguna opinión importante al respecto
ese es el punto ¿cómo sabes que no es importante?

Y a propósito de obituarios; le dije a Vicky : Cuando te mueras voy a poner tus cenizas en un reloj de arena y voy a decir: "Ora sí cabrona ¡a trabajar!" Entonces ella dijo: Cuando te mueras voy a poner tus cenizas en la arena del gato.
carlos dijo…
también podrías intentar ser "proactivo". No entiendo bien a bien qué es eso, pero lo dicen en las solicitudes de trabajo. Supongo que es algo que te hace ser una mejor persona --en cuyo caso, un buen proyecto de vida sería llegar a ser proactivo.

No escribirás los grandes libros, pero a que te contratan en una de esas medianaempresas de oficinas alienantes donde el PIVOTE ESPIRITUAL (oí eso una vez en una entrevista callejera que sacaron en el 22 y no me lo he sacado de la mente) son los viernes de table dance. Luego te darás cuenta de que te estás poniendo gordo, que ya te sabes toda la carta de bebidas caras, y que el pelo comienza a caer. Entonces dirás: "puta proactividad".

No, mejor hay que seguir intentando con lo de ser una de esas personas que se quiere ser pero que no están bien definidas, aunque se sepa que son buenos proyectos de vida.
Unknown dijo…
Debido a que no dejaste area para comentar en el ultimo post, solo dire que me gustó mucho, pues en de alguna manera todos nos sentimos asi en algun momento de nuestras vidas:
"No, no soy una buena persona, y no estoy ya seguro de desear serlo" ahhhhh eso suena muy maryblanquesco! maldición, creo que estoy perdida en tus palabras.

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